Al Green - How can you mend a broken heart
Es fácil estar triste, ser triste, dejar que la tristeza nos invada, que la agridulce melancolía llene unas horas, nos sacie; pero que difícil es forzar la alegría, que difícil sentirla verdadera, poderosa e invulnerable". Fragmento de "Amantea"
Prefiero pensar en otras cosas, llenar mi mente con pasatiempos tontos, busco alguna fascinante nota y la publico en el blog, o simplemente descuelgo alguna flor de aquellas que nacen en las esquinas de mi monitor, rozo con la punta de mis dedos el pasto grisáceo que forma el polvo que se ha asentado en mi escritorio, organizo mas el desorden para que no deje de serlo, así al menos doy la impresión de ser una persona ocupada, de vez en cuando me cae encima un diluvio de hojas sin importancia, mientras las observo formando delgadas montañas me pregunto el por qué de tal cantidad de sin sentidos, proferidos por viejos lacónicos, filósofos, semiólogos, sociólogos que solo engarrotan mi pensamiento, que ganas locas de empapelar mi pared con Saussure, armar barquitos de papel con Webber y crear aviones que surquen el cielo con la filosofía de Sartori. Mientras tanto algunas fotos pasajeras me observan en aquel rincón donde he dejado abandonados mis recuerdos, a lo lejos las observo y pronuncio cada nombre que salta a mi memoria, reconozco muchos rostros amigos… pero no estas tu,
Así son mis días… que transcurren entre horas de una efímera paz, horas que desperdicio pensando en que así tal vez todo esta mejor, prefiero pensarte sola... prefiero pensarte esperando un futuro distinto… prefiero pensar que estas haciendo lo mismo que yo, contando las horas vacías que pasamos anhelando un principio, un comienzo… o al menos el titulo de un capitulo, pensándolo bien me conformaría con un simple párrafo, pero escrito por tus manos, obséquiame unos puntos suspensivos y déjame continuar con la historia, lléname de expectativas, regálame una trama, o permíteme usurparte y colocarte como la protagonista de mi idílica novela, por el momento me conformo en dibujar tu sonrisa, mientras tanto te hago sonreír, después de todo es tu sonrisa lo que le da calor a mi alma, lo que me convence de que aun sigo aquí… lo que hace brotar mis lagrimas, mi sonrisa, mis pensamientos, mis suspiros, mi inquietud, mi desden, mi desesperación, si eres el persistente calor de mi aliento y la obstinada fuerza que me hace caminar.
Francisco Tama G.
HERMOSO.....