Una noche misteriosa

Eran aproximadamente las 8 de la noche de un día viernes, la fecha no me acuerdo. Estaba en mi dormitorio acostado en mi cama tocando mi guitarra. Quería componer una canción, pero la señora inspiración no se aparecía.

Por la ventana inmensa que está en mi cuarto ingresaba un fuerte viento, un viento helado, las cortinas daban la impresión de que fueran fantasmas voladores. La luz fluorescente del foco en el tumbado estaba muy tenue, algo extraño estaba pasando, pero no entendía qué.

Me empecé a sentir muy pesado, no podía levantarme. Mis piernas estaban muy pesadas, mis brazos habían perdido la fuerza que de costumbre se tener. Fue como si un poderoso imán estuviera bajo mi cama que me atraía y no me dejaba ponerme en pie. Quería salir de mi habitación, quería gritar, pero no podía; me sentía cada vez más débil; la respiración me faltaba; mis ojos poco a poco se iban cerrando, y la tenue luz de mi cuarto iba desapareciendo lentamente. A duras penas escuchaba una música, muy pero muy lejana...

Me desperté al día siguiente, todo seguía igual. Me despertó la luz del sol que me pegaba directamente en mi rostro, pero seguía sin saber qué había ocurrido. En un principio pensé que se había tratado de un sueño, de una pesadilla, pero no!. Les pregunté a todos en mi casa si algo había sucedido y todos me miraban extrañados, como que si estuviera loco. Subí a mi habitación y saqué como conclusión de que fue una noche confusa, llena de dudas. Fue una noche misteriosa.

Y dos días después aquella situación de la que fui testigo, me inspiró para componer una canción:

Héctor Pérez - Vientos Helados

VIENTOS HELADOS - (1/octubre/2005 - derechos reservados de autor)

Era un día viernes por la noche

Estaba solo en mi habitación

Solo nada más con mi guitarra

Tratando de componer una canción...

El viento helado entraba por mi ventana

Y aquella luz, se disipaba...

Totalmente, totalmente asustado

Y sin que nadie esté aquí a mi lado... oh... oh... ah.. ay... oh.. oh...

Y aquella fuerte brisa me acosaba

Era una noche de vientos helados

¡Ay! Quisiera que estés a mi lado

porque este frío me está matando...

Me había quedado en mi cama bien dormido

Y lo que sucedió no era un sueño...

Habías entrado en mi habitación

Y sin darme cuenta compuse esta canción... oh... oh... ah.. ay... oh.. oh...

CORO:

VIENTOS HELADOS EN LA MADRUGADA...

Y SOLO YO CON MI GUITARRA

VIENTOS HELADOS POR MI VENTANA...

Y AQUELLA LUZ SE DISIPABA

VIENTOS HELADOS ME ACOSABAN...

Y TODO MI CUERPO ME TEMBLABA

VIENTOS HELADOS EN MI HABITACIÓN...

VIENTOS HELADOS EN ESTA CANCIÓN